Arranque para el olvido…

Huracán cayó por 3 a 1 frente a Aldosivi en su visita a Mar del Plata, por la primera fecha del torneo 2012/2013 de la B Nacional. La ilusión de un buen arranque de temporada era muy grande, y la gente acompañó como siempre, pero el Globo se mostró desdibujado y con muchas dudas.

Se venía palpitando durante toda la semana. Las expectativas eran muchas, y había motivos. Buena pretemporada, varios amistosos invicto, algunos refuerzos prometedores. Sin embargo, Huracán siempre nos sorprende. En menos de media hora del primer tiempo, las esperanzas de llevarse un resultado positivo se habían ido casi por completo.

De entrada hubo un hecho llamativo. Rivoira mandó a la cancha un equipo diferente al que paró durante el receso y los últimos entrenamientos. Busse, que estaba habilitado para jugar ya que Independiente levantó sus inhibiciones, le dejó su lugar a Barrales. El ex Banfield y Unión, que no había participado de las prácticas de fútbol hasta la última semana, formó dupla de ataque con Vega, y Milano, que durante toda la pretemporada jugó de delantero, se retrasó para hacer las veces de volante.

Pese a ese cambio de último momento, los primeros momentos del encuentro fueron prometedores. La línea de cuatro del fondo despejó cuando lo tuvo que hacer, Battaglia pedía la pelota en el medio para encabezar los ataques, y  un Pity Martínez por derecha parecía que iba a ser la pesadilla de la defensa del Tiburón. Sin embargo, en poco tiempo el nivel cayó, y mucho. Encima, Aldosivi no terminaba de emparejar aún el juego cuando, a los 22 minutos, Mancinelli tomó de la camiseta a Villalba en el área y el árbitro, Rapallini, pitó penal para los locales (amarilla para el pelado). Matías Gigli, desde los doce pasos, puso en ventaja a los marplatenses. Dos minutos después, Danelón cometió una innecesaria infracción por su banda. Malcorra envío un centro al corazón del área que Zunino cabeceó al ángulo de Islas. Palo y a la bolsa, 2 a 0. En muy poco tiempo, Huracán se encontraba dos goles abajo y perdido en la cancha. Ahí comenzaron las imprecisiones…

Desde el segundo tanto de Aldosivi, la actuación de los jugadores de Huracán fue paupérrima. Se hizo agua en todas las líneas. Mancinelli y Domínguez no tuvieron la solidez que mostraron en los amistosos de pretemporada. Minici no desbordó nunca. Barrales, si bien pedía la pelota, no podía correr con ella, tampoco pasar o eludir a un rival, ni siquiera ganarle en el cuerpo a cuerpo; fue, sin dudas, el peor de los quemeros.

Y lo que más sintió el Globo fue la muy pobre actuación de tres hombres: Martínez, quien entregó mal casi todos los pases y estuvo ausente durante largos pasajes del partido; Vega, que no pudo establecer asociación futbolística con nadie por estar muy solo arriba; y Milano, quien arrancaba de mitad de cancha y tenía que recorrer mucha distancia con la pelota, y sortear muchos defensores, si quería hacer daño.

Dado de tal forma el partido, Aldosivi creció. Poco a poco fue cerrándose en el fondo, a punto tal que Huracán tuvo muy pocas llegadas al arco rival. Los desbordes de Malcorra y los piques de Gigli eran profundos y complicaban a la defensa del Globo. Los locales tuvieron varias chances de ampliar el marcador, si no sucedió fue solo gracias a errores propios, y a Islas, cuya actuación fue regular, y no tuvo responsabilidad en ninguno de los goles. Battaglia y Villarruel son aquellos cuya actuación fue, parcialmente, rescatable. El primero por haber pedido siempre la pelota e ir para adelante (si bien cometió errores en la distribución), y el segundo por concretar varios quites y recuperaciones de mitad de cancha hacia atrás.

En los últimos cinco minutos sucedió de todo. A los 40, Domínguez tira un pelotazo que Oviedo (que había ingresado por Barrales) peina para Vega, éste la devuelve al juvenil, que remata de afuera del área y la coloca contra un palo. Descuenta Huracán. Un gol abajo y cinco, más el descuento, por jugar. Parecía que el tanto de Oviedo (primero luego de su lesión) era el envión necesario para que el equipo buscara el empate sobre el final del partido. No obstante, un minuto más tarde, Milano forcejea con Zunino por una pelota y, en la calentura del momento, le propició un golpe. Roja directa. Huracán con diez, y casi nada para el pitazo del árbitro.

Pese a estar con uno menos, la esperanza había vuelto con el descuento, y aún recorría el rostro de los más de 2000 quemeros que viajaron hasta Mar del Plata para acompañar al equipo. Pero a los 44, luego de una contra bien llevada a cabo por Aldosivi, Ramis pateó al arco, Islas dio rebote y Seccafien solo tuvo que empujarla para estampar el resultado final.

Duro golpe para Huracán en el arranque de este nuevo torneo. Muchas cosas para corregir. Muchas dudas en cuánto a qué juega el equipo, o el por qué de ciertos jugadores en ciertas posiciones. Pero es muy pronto para conjeturas. Habrá que ver cómo se las ingenia el DT para reemplazar a Milano de cara al próximo partido, y si optará una vez más por Barrales por sobre Oviedo o Quintana.

La próxima fecha, en el Ducó, el Globo recibirá a Gimnasia de La Plata, que visitará el Palacio luego de ganar en su debut frente a Boca Unidos.

Huracán: Islas; Danelón, Mancinelli, Domínguez, Minici; Milano, Battaglia, Villarruel, Martínez; Vega, Barrales.

DT: Héctor Rivoira.

Aldosivi: Campodónico; Roselli, Villalba, Cajaravilla, Zunino; Galbán, Lamberti, Briones, Malcorra; Gigli, Guerra.

DT: Fernando Quiróz.

Árbitro: Fernando Rapallini.

Estadio: José María Minella (Mundialista de Mar del Plata).

Cambios: 15 ST – Busse por Danelón; 15 ST – Ramis por Guerra; 24 ST – Bustos por Villarruel; 31 ST – Oviedo por Barrales; 39 ST – Seccafien por Gigli; 46 ST – Sarraute por Briones.

Goles: 22 PT – Gigli (penal); 24 PT – Zunino; 40 ST – Oviedo; 44 ST – Seccafien.

Amonestados: Mancinelli; Roselli; Villalba; Galván; Briones.

Incidencias: Milano expulsado a los 41 ST.