5 diciembre 2024

Huracán volvió a perder, ésta vez fue en condición de local ante un Boca Unidos que llegaba al Ducó sin haber conocido la victoria y siendo el último en la tabla de posiciones. El equipo juega cada vez peor. Puesto 19 y en descenso directo…

 

Huracán cansa. Esta tarde, por cuarta vez en seis presentaciones, volvió a ser derrotado por su rival. Jugando de local contra quien era, hasta hoy, el peor equipo del torneo (todavía no había ganado y había convertido solo un gol en sus cinco partidos anteriores) cayó por dos tantos contra cero y fue un resultado justo. El Globo no funcionó en ninguna de sus líneas, y las pocas llegadas que tuvo nacieron en pelotazos.

El equipo que condujo esta tarde Gabriel Rinaldi presentó varias modificaciones. Adentro el cordobés Sánchez Prette, cada vez más resistido por la gente pese a que haga las cosas bien o mal. Igualmente, no fue buena la labor del volante. Santiago Chacón hizo un partido regular. Battaglia intentó pero no pudo (cuando lo reemplazaron, se fue silbado y antes de sentarse en el banco insultó e hizo gestos hacia la Miravé). Barrientos, una sombra de lo que fue en su primer paso por el club. El mejor, por voluntad y ganas, fue Vega.

Pasada la media hora de juego, a los 36 minutos, un contraataque terminó en un mano a mano de Gonzalo Ríos, que definió por sobre Islas. Uno a cero y así, con pena y sin gloria, se fue la primera mitad. Ya en la segunda parte, Huracán quiso avanzar, pero cuando lo hizo fue sin ideas, para no perder la costumbre. Desde el arranque del complemento, Oviedo ingresó por Barrales (que se fue con un tirón y mañana se realizará una ecografía para confirmar si se desgarró o no), pero no hizo la diferencia; el juvenil delantero estuvo bien marcado, y recibiendo de espalda en mitad de cancha, nunca va a desnivelar. Más tarde, entraron Milano y Martínez, pero todo fue igual, sin ideas ni juego colectivo. Encima, a los 28, un mal despeje de Walter Ferrero rebotó en Domínguez y le quedó servida la pelota, otra vez, a Gonzalo Ríos, que la cruzó al fondo de la red. Dos a cero, resultado final.

Si bien la tabla marca que Huracán está en el puesto 19, por sobre el ahora último Instituto (próximo rival), es claro que es el peor equipo del torneo. El inicio complicado, del que tanto se habló antes de comenzar la temporada, ya pasó hace varias fechas. Hay que cambiar y mucho. Se debe traer un DT con personalidad y ambición. Es necesario encontrar una idea de juego, más allá de que luego no se pueda plasmar en el campo, al menos hay que saber qué se va a intentar hacer con la pelota. Y, por sobre todas las cosas, hay que empezar a ganar ya, porque los partidos pasan y la soga del promedio cada vez se siente más ajustada en el cuello del Globo.

 

Huracán: Islas; Danelón, W. Ferrero, Domínguez, Minici; Battaglia, Barrientos, Chacón; Sánchez Prette; Vega y Barrales.

DT (interino): Gabriel Rinaldi.

Boca Unidos: Martínez Gullota; Flores, Manchot, Moises, Baroni; Ríos, Frezzotti, Galarza, Archubi; García y Arriola.

DT: Darío Ortíz.

Árbitro: Juan Pablo Pompei.

Estadio: Tomás Adolfo Ducó.

Cambios: 12 ST – Villanueva por Arriola 0 ST – Oviedo por Barrales; 16 ST – Milano por Chacón; 17 ST – Quinteros por Galarza; 22 ST – Martínez por Battaglia; 30 ST – Sánchez Paredes por García.

Goles: 36 PT y 28 ST – Ríos.

Amonestados: 2 ST – Ríos; 5 ST – Minici; 8 ST – Archubi.

 


Dejanos tu comentario: