En la calurosa Misiones, Huracán se impuso a Crucero del Norte por la diferencia mínima y sumó su tercer triunfo consecutivo. El Globo trepó hasta la zona de ascenso, que ocupó durante una única fecha, la primera. Cristian Espinoza fue la figura: profundizó el ataque desde el primer y hasta el último minuto y marcó el gol. La próxima, ante el ya ascendido Unión.
Foto: www.ascensodelinterior.com.ar
Ni el tercero de la tabla ni la insoportable temperatura del norte argentino impidieron que Huracán cumpla el refrán. No hay dos sin tres. Tras conseguir la victoria en la casa del Decano tucumano y ahuyentar los fantasmas del Palacio Ducó ante Santamarina, el Globo bajó al Colectivero -uno de los mejores del certamen- y alcanzó momentáneamente el quinto puesto. Los de Parque Patricios, que acumulan 23 puntos, mantendrán su lugar en la vanguardia hasta el duelo entre Atl. Tucumán (22) y Patronato (21), aunque la esperanza no decrece porque los del Jardín de la República adeudan su jornada libre.
Después de un comienzo estancado, con el calor como protagonista y regulador, llegó el entretenimiento a Garupá. Huracán dominó el primer tiempo; Crucero, el segundo. Ambos equipos se repartieron llegadas y buscaron el arco de enfrente con versatilidad ofensiva. Fue la puntería el factor que inclinó la balanza. A los 41, Toranzo enarboló una buena jugada a metros del área grande, conectó con Ábila y éste, en modo pivote, habilitó con sutileza a Espinoza, que encaró hacia Caffa y remató de zurda contra el palo. Premio merecido para uno de los principales constructores de los tres triunfos hilvanados.
En el complemento, relegado en su campo y en desencuentro con la pelota, el Globo supo defender el resultado. Los de Apuzzo gritaron fuerte cuando el árbitro Baliño hizo sonar su silbato. Otra vez, se sumó en condición de visitante. Otra vez, en el interior. El sol asomó y el presente ya no es tan oscuro. Quedan tres partidos, tres finales. Aunque no depende de sí mismo, si gana todo lo que le queda, Huracán tiene grandes chances de acabar el certamen entre los que jugarán en Primera División el próximo año. Para eso, debe seguir en ritmo, en este ritmo, encendido.
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